Melatonina para complementos alimenticios

El origen de la melatonina

La melatonina es una hormona producida naturalmente por el organismo en la glándula pineal o epífisis.

Conocida como la "hormona del sueño", su función es ayudar a conciliar el sueño.

La epífisis empieza a producir melatonina al anochecer para informar al cerebro de que ha oscurecido e incitarle a ponerse en modo "noche".

La cantidad de melatonina en el torrente sanguíneo alcanza su punto máximo entre las 2 y las 5 de la madrugada y luego disminuye gradualmente hasta el amanecer.

Desaparece del organismo con la luz del día y es sustituida por el cortisol, la hormona que estimula la vigilia.

Propiedades de la melatonina

La melatonina está presente de forma natural, en dosis bajas, en ciertas plantas como la alfalfa, el hinojo, la amapola, el lino, el cilantro y el girasol. 

Se cree que su acción antioxidante protege a la planta contra los efectos de la luz solar y la sequía.

En forma sintética, existen dos tipos: de liberación inmediata y de liberación sostenida. 

A menudo se combina con plantas como la pasiflora, la valeriana o la melisa.

Como tratamiento del insomnio, la melatonina se propone a menudo para la abstinencia de somníferos como las benzodiacepinas.

Como suplemento dietético (1 mg como máximo), trata las dificultades para conciliar el sueño y el jet lag.

No debe superarse una ingesta diaria de 1 mg, ya que puede reducir la producción de cortisol y perturbar el sistema inmunitario.

La carencia de melatonina se debe principalmente a una exposición insuficiente a la luz del día. Suele aparecer en invierno y provoca un sueño de peor calidad.

Puede regularse mediante la exposición a la luz (luminoterapia), con ciertos alimentos como los frutos secos o los plátanos o tomando complementos alimenticios.